El gerente de Transportes de la Municipalidad Provincial de San Román, Hardy Meyer Quispe Lipa, afirmó que se han realizado más de 400 operativos nocturnos para combatir el problema. Sin embargo, cuando se le solicitaron detalles específicos sobre el número de motos internados o sin licencia, no pudo proporcionar información precisa, alegando que había solicitado los datos al área correspondiente.
La falta de estadísticas concretas y la incapacidad para proporcionar resultados tangibles de los operativos han generado dudas sobre la efectividad de las acciones implementadas por la gerencia. Esta situación plantea interrogantes sobre la existencia de un plan de trabajo sólido y eficaz para abordar la problemática.
Sorprendentemente, el gerente anunció que durante el mes del aniversario de la provincia de San Román, la fiscalización del sector transporte pasará a un segundo plano. Esta decisión ha sido cuestionada, ya que implica una pausa en los esfuerzos por combatir la delincuencia en un momento crítico.
La gerencia mencionó que se está trabajando en una nueva ordenanza para mejorar las condiciones del servicio de transporte. Sin embargo, la falta de un reglamento actualizado y la demora en la implementación de medidas como la identificación visible de los vehículos generan dudas sobre la capacidad de respuesta ante la situación actual.
