El adolescente de iniciales A.B.B.C. de 16 años que ingresó al Hospital Carlos Monge Medrano de Juliaca con quemaduras de segundo y tercer grado en el 32% de su cuerpo. El director del nosocomio, José Mamani Vilca, informó que las lesiones afectan principalmente cara, tórax, abdomen y miembros superiores del menor, cuyo estado es reservado.
El joven, fue admitido en el nosocomio juliaqueño a las 7:22 de la mañana en condición estable tras recibir hidratación. Debido a la gravedad de las quemaduras, las autoridades sanitarias gestionan su traslado urgente a una unidad especializada en Arequipa o Lima; sin embargo, las dificultades por la falta de camas disponibles retrasan si evacuación.
El caso ha conmocionado a la opinión pública ya que, este habría sido un salvaje castigo materno. Según declaraciones del menor, su madre le habría arrojado un líquido inflamable y le prendió fuego como reprimenda por llegar tarde a casa.
Moisés Timoteo Barrantes, padre del adolescente, denunció entre lágrimas la crueldad del acto y exigió justicia. Expresó su indignación al ver a su hijo postrado y desfigurado, temiendo por su futuro. Además, acusó a la madre de burlarse del estado del menor durante una visita al hospital.
El progenitor criticó la decisión de la fiscalía de liberar a la presunta agresora y pidió la máxima sanción. Asimismo, solicitó apoyo para cubrir los gastos médicos y el traslado a un centro especializado, compartiendo su número de contacto para posibles donaciones: 958-97-7021.
Las autoridades sanitarias continúan buscando opciones para el traslado urgente del menor a un centro especializado en quemados, ya sea en Arequipa o Lima. Mientras tanto, el caso ha generado un debate sobre la violencia intrafamiliar y la necesidad de protección a menores en situaciones de vulnerabilidad.