La Municipalidad Distrital de San Miguel en la provincia de San Román, adjudicó en tan solo 29 minutos la licitación para el alquiler de una camioneta 4×4 de uso exclusivo para el alcalde Cristín Nicolás Mamani Mamani. El contrato, valorizado en 67 mil soles, fue tramitado de manera “express” mientras los vecinos protestaban contra el incremento de arbitrios municipales, según consta en el portal SEACE.
El controversial proceso se inició el 31 de enero con un requerimiento de la secretaría general y culminó el 28 de febrero, cuando la subgerencia de logística publicó la convocatoria a las 4:55 pm y adjudicó la buena pro a las 5:24 pm del mismo día, generando sospechas sobre la transparencia del procedimiento administrativo.
Tres proveedores presentaron ofertas con una sospechosa diferencia de 500 soles entre cada propuesta: Grupo MEVA M&V SAC (S/. 67,000), Melisa Corina Quispe Velásquez (S/. 67,500) y Tania Yudith García Pozo (S/. 68,000), quedando todas justo por debajo del presupuesto municipal establecido en 68,090 soles.
La empresa ganadora, Grupo MEVA M&V SAC, ha provisto anteriormente servicios al municipio por más de 130 mil soles y ahora recibirá 6,700 soles mensuales durante diez meses por el alquiler del vehículo. Este gasto ocurre en un momento crítico para las finanzas municipales, ya que San Miguel enfrenta un recorte presupuestal de aproximadamente 3 millones de soles en 2025.
El monto de la adjudicación genera mayor controversia considerando que el Gobierno Regional de Puno suele alquilar vehículos similares por aproximadamente 25 mil soles para cuatro meses (6 mil soles mensuales); por lo que algunos vecinos de San Miguel piden investigación al curioso contrato en tiempo record.
Esta licitación flash ha provocado indignación entre los ciudadanos, quienes cuestionan la necesidad del gasto en medio de la crisis económica que atraviesa el distrito y los recientes incrementos en arbitrios municipales e impuesto predial, mientras los regidores permanecen en silencio frente a lo que algunos vecinos califican como un “despilfarro injustificado”.