A pocos días de recordarse el fallido golpe de Estado del 7 de diciembre de 2022, el expresidente del Consejo de Ministros, Aníbal Torres, rechazó las acusaciones de la Fiscalía que lo vinculan con la redacción del discurso leído por el expresidente Pedro Castillo. Según Torres, el mensaje que anunciaba el cierre del Congreso fue una sorpresa y no contó con la coordinación necesaria para ejecutarse como un golpe de Estado.
Torres detalló que la mañana del incidente estuvo reunido en la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) con asesores y negó haber mantenido reuniones con Castillo antes de ser llamado a las 11 de la mañana. Afirmó que, durante la breve interacción en el despacho presidencial, Castillo anunció que daría un mensaje, lo que Torres asumió relacionado con la censura que se debatiría en el Congreso esa tarde.
Al escuchar el discurso de Castillo, Torres se alarmó por el tono golpista e interrogó al presidente sobre la coordinación con las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional. Según su relato, Castillo le respondió que no debía preocuparse, lo que llevó a Torres a consultar con los entonces ministros del Interior y de Defensa, quienes negaron tener conocimiento sobre una intervención militar o policial. Esto reforzó en Torres la idea de que no se trataba de un golpe estructurado.
Torres también desmintió las afirmaciones de la Fiscalía que sugieren que él habría elaborado el discurso de Castillo. Indicó que expresiones como “cierre del Congreso” o “asamblea constituyente”, mencionadas en el mensaje, eran demandas recurrentes de la población en sesiones descentralizadas del gobierno, pero negó haber promovido el cierre del Parlamento. “El que diga que promoví el cierre, que presente pruebas”, declaró enfáticamente.
El ex primer ministro criticó además la inestabilidad política que sigue afectando al país, señalando que el expresidente Castillo enfrentó oposición desde antes de asumir el cargo, con intentos constantes de censura por parte del Congreso. Consideró que este contexto de enfrentamientos y desestabilidad contribuyó al clima que desembocó en los hechos del 7 de diciembre.
Finalmente, Torres cuestionó las reformas impulsadas por el Congreso y la falta de respaldo a la actual presidenta Dina Boluarte, a quien describió como carente de aceptación tanto de la población como del sector empresarial. Estas circunstancias, dijo, agravan la crisis política y social que persiste en el país.
