La Municipalidad Provincial de San Román anunció una reestructuración completa de la Gerencia de Seguridad Ciudadana y la Subgerencia de Serenazgo tras una serie de incidentes que han dañado gravemente la imagen de este servicio esencial. La medida incluye la destitución del subgerente de Serenazgo, Ventura Zapata Galecio, quien fue captado libando licor en la vía pública durante las festividades del Ño Carnavalón, escoltado por agentes municipales y mostrando comportamientos inapropiados con una trabajadora municipal.
El incidente ocurrió el 1 de marzo y se sumó a otro escándalo que involucró a cinco agentes de serenazgo, acusados de robo agravado. Tres de ellos recibieron prisión preventiva, mientras que los otros dos quedaron con comparecencia restringida. Estos hechos han profundizado la crisis de credibilidad que enfrenta el área de seguridad ciudadana en Juliaca.
Fuentes cercanas al municipio confirmaron que el alcalde provincial se mostró «sorprendido y muy molesto» ante los sucesos, lo que lo llevó a ordenar una revisión exhaustiva de la gestión del Serenazgo. La investigación busca identificar otras posibles irregularidades y garantizar que el servicio recupere la confianza de la población.
«No toleraremos ningún tipo de conducta que manche la imagen de nuestra institución», habría manifestado el burgomaestre, según las fuentes. El alcalde exigió una evaluación integral del personal de Serenazgo para asegurar su idoneidad y compromiso con la seguridad de los ciudadanos.
La reestructuración incluirá cambios en el personal directivo y una revisión de los protocolos de selección y capacitación de los agentes. Además, se implementarán mayores controles internos para prevenir el uso indebido de recursos públicos y evitar que los funcionarios incurran en actos que comprometan la integridad del servicio.
La medida busca recuperar la confianza de los juliaqueños en un servicio que ha sido clave para combatir la delincuencia en la ciudad. Sin embargo, los recientes escándalos han dejado en evidencia la necesidad de una reforma profunda que garantice transparencia y eficiencia en el área de seguridad ciudadana.
La Municipalidad espera que estas acciones permitan restablecer la credibilidad del Serenazgo y asegurar que sus agentes cumplan con su labor de proteger a la población, en lugar de ser protagonistas de actos que generan desconfianza y malestar entre los ciudadanos.
