Un tenso operativo de desalojo se desarrolló en la segunda cuadra de la calle Jerusalén, en el Cercado de la ciudad de Arequipa. El inmueble, objeto de un proceso judicial de 8 años, era alquilado inicialmente para funcionar como hospedaje. Pero terminó operando como una discoteca LGTB de manera clandestina llamada Imperio Freetown.
Desde primeras horas, personas al interior del local han adoptado medidas de resistencia extrema. Al menos 15 extranjeros se atrincheraron en la casona. Lanzaron botellas de vidrio con combustible y una mecha encendida a la vía pública.
Estas personas encapuchadas fueron contratadas por el ocupante, para impedir el desalojo a cargo de agentes policiales. Además, se reportó el ingreso previo de balones de gas y otros elementos dañinos, así como la colocación de llantas y piedras en la parte frontal de la casona.
Tras las bombas molotov, aproximadamente a las 11:00 a.m. se logró controlar el fuego en la vía pública. Posteriormente, se logró retirar a los sujetos que impedían el desalojo, aunque algunos testigos indican que otros huyeron por los techos.
Conflicto por discoteca en Arequipa
La abogada de los propietarios, Carelia Encalada, explicó el origen del conflicto: “El propietario, el señor Víctor Choque, le alquila al señor César para uso de hotel y eventos sociales, pero nunca se le alquiló para discoteca”. Señaló además que el inquilino, tras pagar solo dos meses, “dejó de aparecer y se convirtió en un ocupante precario”.
La resistencia ha generado alta preocupación por la seguridad. La abogada Encalada pidió mayor apoyo de autoridades. Agregó que la Fiscalía de Prevención del Delito se ha negado a intervenir, argumentando que el caso le compete al juez.
La orden judicial de desalojo, emitida el 6 de junio, aún espera ser ejecutada. La presencia de individuos con los rostros cubiertos y la utilización de bombas molotov ha creado un escenario de alto riesgo para vecinos y transeúntes.
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