El teniente gobernador de Huanchicani, Abraham Mayta, informó que 27 familias de su comunidad quedaron sin hogar debido a un deslizamiento de tierra causado por intensas lluvias en el distrito de Coasa, en la provincia de Carabaya. Según Mayta, la situación es crítica, ya que las familias afectadas carecen de alimentos, agua y refugio seguro, y la ayuda de las autoridades aún no ha llegado a la zona.
El desastre natural también dejó a tres personas temporalmente desaparecidas. Mayta explicó que, tras largas horas de búsqueda, lograron rescatar a los desaparecidos, quienes afortunadamente se encuentran a salvo. Sin embargo, gran parte de sus pertenencias fue destruida por el lodo y los escombros arrastrados desde la montaña, dejando a las familias en situación de extrema vulnerabilidad.
Mayta relató que los habitantes de la comunidad trabajaron durante toda la noche en tareas de rescate, enfrentando condiciones peligrosas debido a la falta de luz y la inestabilidad del terreno. La intensidad de las lluvias ha empeorado la situación, provocando nuevas grietas en el cerro, lo que eleva el riesgo de más deslizamientos.
Las 27 familias afectadas, que incluyen niños y ancianos, están actualmente refugiadas en un parque sin instalaciones adecuadas. Con improvisadas carpas de plástico, los residentes intentan resguardarse de la lluvia constante, pero el riesgo de más derrumbes en la zona hace que el peligro persista.
El teniente gobernador señaló que han intentado contactar a la municipalidad de Coasa, pero no han recibido respuesta directa. A través del prefecto distrital enviaron evidencias del desastre, pero hasta el momento, no han recibido ningún tipo de apoyo estatal.
Mayta hizo un llamado urgente a las autoridades de Defensa Civil y al gobierno regional para que envíen ayuda humanitaria lo antes posible, especialmente alimentos, ropa y refugio seguro. La comunidad se encuentra a cuatro horas de distancia de la capital distrital, accesible solo por vehículos 4×4, lo que dificulta la llegada de ayuda.
Las lluvias han aumentado en intensidad en ese sector, y el riesgo de nuevos deslizamientos sigue siendo alto. Las familias de Huanchicani permanecen en constante alerta ante el temor de nuevos derrumbes y la falta de condiciones seguras en sus alrededores.