El cierre del puente internacional entre Perú y Bolivia ha provocado un auge del comercio ilegal en la frontera de Desaguadero. Según Nelson Costrado Chura, presidente de la Central Única de Barrios de Desaguadero, los comerciantes ahora prefieren utilizar rutas alternativas para transportar sus mercancías, evadiendo controles aduaneros y fiscales.
La situación ha generado preocupación por la falta de control sobre los productos que ingresan y salen de ambos países. Costrado Chura señaló que los comerciantes utilizan “guantes” o pasos no oficiales para cruzar la frontera, lo que implica mayores gastos pero les permite evadir impuestos y regulaciones aduaneras.
Entre los productos que se comercializan ilegalmente se encuentran huevos, aceite, azúcar y arroz provenientes de Bolivia, así como frutas, papa y cebolla del lado peruano. Además, se ha detectado el ingreso de productos chinos y ropa desde Lima hacia Bolivia sin declaración aduanera, afectando a los comerciantes locales de Desaguadero.
Ante esta situación, Costrado Chura anunció que se solicitará formalmente a las cancillerías de Perú y Bolivia la reapertura de la frontera. Esta medida busca normalizar el comercio y evitar las prácticas ilegales que actualmente perjudican a los comerciantes que operan dentro de la legalidad y al Estado, que deja de percibir importantes ingresos por impuestos.