El presidente del comité de obra de la urbanización Espinal en San Román, Ángel Choquehuanca Quispe, informó que la empresa constructora C&C adeuda salarios a 40 trabajadores desde el 15 de octubre, lo que ha afectado el avance del proyecto de pistas y veredas, valorizado en 5 millones de soles. La paralización de la obra ha generado preocupación entre los vecinos y trabajadores.
Este proyecto, financiado por el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, está detenido porque el residente, el supervisor y el personal administrativo de la empresa han abandonado la obra. Según Choquehuanca, no queda nadie de seguridad ni administración en el lugar, y la oficina permanece cerrada, lo que agrava la situación de los trabajadores.
El Sindicato de Construcción Civil intervino en el caso y ha presentado una queja formal ante SUNAFIL, que ya ha verificado irregularidades en las condiciones laborales. Entre las deficiencias identificadas, se menciona la falta de categorización adecuada entre operarios, oficiales y peones, afectando los derechos de los trabajadores.
Los trabajadores, que tenían un acuerdo de pagos quincenales con la empresa, están en paro de «brazos caídos» mientras esperan el pago de dos periodos pendientes. La empresa argumenta que los retrasos en las valorizaciones municipales han dificultado el cumplimiento de los pagos, pero los dirigentes sindicales aseguran que esto no es excusa para no cumplir con las obligaciones salariales.
