El vicepresidente del Comité de Vigilancia del Convenio 025 de Puno, Eduardo Suni, anunció avances en el proyecto de saneamiento para la ciudad. El plan, que busca mejorar la infraestructura sanitaria, requiere la aprobación del Banco Mundial y la emisión de un decreto supremo para su financiamiento, marcando un paso crucial para su ejecución.
Eduardo Suni explicó que el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento debe emitir una resolución directoral para aprobar el expediente técnico. Para ello, se conformará una comisión técnica integrada por representantes de la municipalidad, el comité de vigilancia y EMSA Puno, asegurando un proceso transparente y participativo.
El proyecto necesita la validación conjunta del OPMI del Ministerio de Vivienda y la Dirección General de Programación Multianual de Inversiones del Ministerio de Economía y Finanzas. Estas aprobaciones son esenciales para acceder al financiamiento externo que permitirá ejecutar las obras de saneamiento en la región.
Para fines de octubre, el Banco Mundial visitará Puno para evaluar el diagnóstico del lago Titicaca y el sistema de alcantarillado. Suni destacó que, a diferencia de otros proyectos, este cuenta con personal técnico especializado, lo que garantiza una implementación eficiente y de calidad.
El cronograma establece que, para la última semana de febrero, el proyecto será presentado al Banco Mundial para su evaluación financiera. Se espera que, a fines de marzo, el directorio de la entidad internacional apruebe los fondos necesarios para su ejecución.
Una vez obtenido el financiamiento, el gobierno central emitirá un decreto supremo que confirmará el respaldo económico del Banco Mundial al Convenio 025. Este paso será clave para iniciar las obras, que representan un avance histórico en la mejora de las condiciones sanitarias y ambientales de Puno.


