El economista Walter Apaza Zela analizó el crecimiento económico del Perú en 2024, señalando que, a pesar de superar el 3%, este aumento no ha impactado positivamente en la economía de los hogares. Apaza explicó que una gestión inadecuada de los recursos ha impedido que los beneficios lleguen a las familias, dejando sin mejoras visibles a la mayoría de los ciudadanos.
Según Apaza, las inversiones y políticas públicas están concentradas en Lima, mientras las regiones del interior permanecen desatendidas. Este desequilibrio ha generado un desarrollo desigual que alimenta la insatisfacción social, ya que muchas familias en las provincias no perciben los frutos del crecimiento económico.
El economista también cuestionó la labor del Congreso, al considerar que no actúa en favor de la ciudadanía. En su opinión, las decisiones de los legisladores benefician a grupos con intereses particulares, lo que acentúa la desconexión entre las autoridades y las necesidades reales del país.
Apaza destacó que es urgente replantear las políticas públicas, orientándolas hacia una distribución más justa de los recursos. Indicó que se debe priorizar no solo el crecimiento económico, sino también el bienestar de las familias, especialmente en las regiones, para lograr un desarrollo que sea verdaderamente inclusivo.