La Defensoría del Pueblo alerta sobre conflictos territoriales en las provincias de Carabaya y Sandia en Puno, donde disputas limítrofes entre localidades han generado tensiones y favorecido el incremento de actividades ilícitas como minería ilegal y tala de árboles.
El Comité Regional de Prevención de Conflictos analizó los problemas de delimitación territorial entre las localidades de Coasa y Limbani, pertenecientes a las provincias mencionadas, así como las tensiones entre los distritos de Alto Inambari, Patambuco y Phara.
La Defensoría recordó que estos conflictos fueron alertados desde el año 2023, cuando se reportaron enfrentamientos en Pacchani y otras zonas de la región, situación que ha generado preocupación entre los pobladores de estas áreas en disputa.
«La población ha advertido el incremento de actividades ilícitas como minería ilegal, tráfico de armas y tala de árboles», señaló la institución al destacar cómo la falta de límites territoriales claros favorece la expansión de estas actividades criminales.
La ausencia de demarcación territorial precisa permite que grupos ilegales aprovechen estas zonas grises para desarrollar sus operaciones sin control efectivo de las autoridades competentes, lo que agrava la situación de inseguridad en la región.
«Estos hechos requieren acciones urgentes de coordinación interinstitucional para evitar nuevos enfrentamientos», advirtió la Defensoría del Pueblo al hacer un llamado a las autoridades para que implementen medidas preventivas en estas áreas conflictivas.