Las diferencias culturales en torno a danzas como la morenada y la diablada entre Perú y Bolivia vuelven a surgir con la intención de lanzar el carnaval de Oruro en la capital peruana. Omar Aramayo, escritor, destaca que cuando estas festividades son consideradas patrimonio en Perú, a menudo generan rechazo por parte de los bolivianos.
Según Aramayo, la promoción de esta actividad en Lima se percibe como una provocación para los peruanos, ya que Bolivia sostiene que Perú ha apropiado estas danzas. Sin embargo, señala que la originalidad de estas danzas proviene de una sola cultura.
El escritor hace un llamado a las autoridades del Ministerio de Cultura para que tomen medidas para proteger y respetar nuestras danzas. Además, insta al Ministerio de Relaciones Exteriores a evitar conflictos, ya que estas situaciones podrían generar tensiones innecesarias.
Aramayo destaca la importancia cultural de la Festividad Virgen de la Candelaria en Perú y su significado para los habitantes de Puno. En última instancia, subraya que depende de las autoridades no permitir que ciertos grupos promuevan este tipo de acciones en nuestro país.