La Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), en su calidad de entidad convocante, ha cancelado de manera intempestiva el proceso de licitación «ampliación y mejoramiento de los servicios de agua potable y alcantarillado de la ciudad de Juliaca-Puno», sin que exista mayor sustento técnico y/o legal, amparándose únicamente en la potestad de discreción de dicha entidad para dar por cancelado el proceso.
Según especialistas, esta decisión afecta evidentemente a la población de Juliaca, quienes desde hace catorce años vienen aguardando concretar la adjudicación y construcción de dicho proyecto emblemático. No obstante, fuentes oficiales indican que existirían intereses particulares que han primado sobre el interés común de la población.
Cabe recordar que la mandataria Dina Boluarte anunciaba con bombos y platillos que en la ciudad de Juliaca se desarrollaría un proyecto para que el servicio de agua y desagüe sea de uso exclusivo de los lugareños, diferenciándose con ello de anteriores mandatos que dejaron en el olvido las necesidades de los residentes de Juliaca. Sin embargo, el gobierno de turno no ha hecho más que generar falsas expectativas.
Como se sabe, el proceso para llevar a cabo dicho proyecto se encontraba en la última etapa, ya que se había procedido con la evaluación y calificación de postores, estando únicamente pendiente el otorgamiento de la buena pro al postor seleccionado. Sin embargo, los funcionarios públicos a cargo de dicho proceso dispusieron que la licitación en cuestión quedara cancelada.
La entidad utilizó la siguiente contorsión argumental: «asimismo, UNOPS podrá, a su discreción absoluta, dar por terminado o desistir del proceso de licitación sin posibilidad de que esta decisión sea recurrida, en cualquier momento del proceso de licitación y evaluación y antes de la firma del contrato».
Además, es necesario advertir que nada asegura que una nueva licitación no tendrá los mismos problemas, ya que estos procesos siempre van a estar cuestionados y siempre van a intentar poner trabas mediante argucias, corroborando que, a la fecha, lamentablemente, las obras emblemáticas del Perú siguen a merced de intereses particulares de algunas cúpulas de poder que no les importan la indispensable necesidad como el saneamiento y los intereses vitales de la población.
En resumen, la decisión de la UNOPS de cancelar el proceso de licitación del proyecto de agua potable y alcantarillado de Juliaca afecta gravemente a la población de la ciudad y parece haberse tomado sin un sustento técnico o legal adecuado. Además, es necesario estar alertas ante posibles intereses particulares que puedan estar primando sobre el interés común de la población y seguir luchando por obras emblemáticas que satisfagan las necesidades de la población y promuevan el desarrollo económico del país.
