Solo 40 efectivos policiales trabajan en turnos de 20 para proteger el distrito de Ananea y el centro poblado de La Rinconada, mientras viven en condiciones infrahumanas que denuncia públicamente Efraín Quispe Huaynacho, presidente de la Central de Barrios Unificada del centro poblado. Esta situación crítica expone la precariedad del sistema de seguridad en la zona minera más peligrosa de la región.
Efraín Quispe Huaynacho exige la construcción inmediata de una comisaría moderna en el distrito de Ananea tras múltiples reuniones fallidas con autoridades regionales y nacionales. El dirigente barrial sostiene que las autoridades del distrito, junto con la multisectorial de Ananea y rondas campesinas, desestimaron injustificadamente la declaratoria de estado de emergencia, pero exigen la construcción de esta infraestructura.
Las gestiones ante el gobierno regional no obtienen respuestas concretas sobre la instalación de una mesa técnica de alto nivel que aborde integralmente los problemas de seguridad ciudadana. Quispe confirmó tres reuniones con el viceministro del Interior para tratar exclusivamente temas de inseguridad y infraestructura policial en La Rinconada.
«No hay petitorio técnico con plan de contingencia de corto, mediano y largo plazo», criticó el dirigente al referirse a la gestión de autoridades regionales. Su demanda incluye logística, equipamiento, presupuesto y profesionales especializados en inteligencia para combatir frontalmente la delincuencia que azota el centro poblado y su distrito.
La ausencia de equipos de geolocalización limita las operaciones policiales contra la delincuencia organizada que opera en La Rinconada, según denunció Quispe tras presentar documentos formales al consejero regional, gobierno regional, general de zona, viceministro y cinco congresistas de la República. Ninguna gestión ha producido resultados concretos hasta la fecha.
«Nos deben invitar a las reuniones de CORESEC para plantear problemas», exigió el presidente barrial al cuestionar la voluntad política del gobierno regional. Quispe considera fundamental que las autoridades presenten argumentos legales, técnicos y presupuestales para solucionar la crisis de seguridad que atraviesa el distrito minero.
La construcción de la comisaría requiere actualización del perfil de proyectos y del proyecto técnico antes de asignar presupuesto para iniciar obras. Quispe advirtió que continuará las gestiones ante todas las instancias hasta lograr la construcción de infraestructura digna para incrementar el número de efectivos policiales en la zona.
«Primero tenemos que darle buen trato a la Policía Nacional», sostuvo el dirigente al denunciar las condiciones habitacionales de los 40 efectivos que actualmente brindan seguridad. Su propuesta incluye coordinación estrecha, inteligencia policial y contra inteligencia para capturar delincuentes y limpiar las instituciones de seguridad en La Rinconada.