Cuatro semanas de trabajo impago han llevado a la paralización total de la construcción del hospital de EsSalud en Alto Puno, donde más de 380 obreros, incluidos trabajadores recién incorporados, mantienen suspendidas las labores ante la falta de respuestas claras de la empresa china contratista y la entidad de salud.
El dirigente del comité de obra confirmó que los trabajadores no han recibido sus remuneraciones correspondientes, situación que afecta directamente a los trabajadores en este proyecto de infraestructura hospitalaria. La empresa China encargada y EsSalud se responsabilizan mutuamente por el incumplimiento, argumentando problemas administrativos relacionados con valorizaciones y desembolsos pendientes.
Según informó la dirigencia obrera, existen fondos disponibles para cubrir las remuneraciones adeudadas, pero conflictos internos entre ambas partes impiden la ejecución efectiva de los pagos. Los trabajadores otorgaron facilidades durante dos semanas, esperando una solución administrativa que permita regularizar la situación salarial sin recurrir a medidas de protesta.
La falta de garantías de pago ha generado que los obreros rechacen las presiones para retomar labores sin asegurar el abono de lo adeudado. Los manifestantes denunciaron represalias y amenazas por parte de la empresa contratista, que busca reanudar los trabajos sin resolver previamente la deuda salarial acumulada.
El alcalde del centro poblado de Alto Puno Miler Paul Aedo Jallo en compañía de un juez de paz se hicieron presentes en la obra para constatar la situación de los trabajadores y verificar las condiciones de la paralización. Las autoridades locales registraron las demandas laborales y el estado actual de suspensión total de actividades en la construcción hospitalaria.
Una reunión programada para este martes entre la gerencia de la empresa y EsSalud en Lima genera expectativas entre los trabajadores, quienes esperan una respuesta definitiva. La reunión en la capital representa la última oportunidad para resolver el conflicto antes de que se prolongue indefinidamente la paralización de obras.
Los obreros mantienen su posición firme de no retomar labores hasta recibir el pago completo de las cuatro semanas adeudadas, rechazando cualquier propuesta que no incluya el abono inmediato de sus remuneraciones y garantías futuras de cumplimiento puntual
La construcción del hospital del Altiplano permanece completamente suspendida mientras los trabajadores aguardan los resultados de las gestiones en Lima, manteniendo la medida de protesta hasta obtener una solución satisfactoria que garantice sus derechos laborales y salariales.


