El jefe de seguridad de la Universidad Nacional del Altiplano (UNA) Puno, Mauricio Chahuares Rivera, sigue en su puesto a pesar del anuncio del vicerrector de investigación, Ariel Rogelio Velazco Cárdenas, sobre su posible reemplazo. Trabajadores administrativos y estudiantes exigen su destitución, acusándolo de atropellos contra estudiantes y de estar involucrado en irregularidades.
Según empleados de la universidad, el anuncio del vicerrector académico sobre el cambio del jefe de seguridad no se ha materializado. La comunidad estudiantil demanda que se concrete esta acción de manera inmediata.
Los estudiantes y dirigentes universitarios han manifestado su exigencia de remover a Chahuares Rivera de su cargo. Le atribuyen actos de abuso contra estudiantes y su participación en una serie de irregularidades dentro de la institución.
Noé Nilton Phocco Yucra, miembro del Consejo Universitario, ha señalado que Chahuares Rivera, considerado un hombre de confianza del rector, habría instigado los recientes enfrentamientos en los que la estudiante Kimberly Chávez Mamani resultó herida.
Además, algunos trabajadores de la universidad han denunciado que Chahuares Rivera estaría aprovechando su posición para colocar a personas cercanas en puestos clave dentro de la institución, supuestamente con el respaldo del rector.
La situación ha generado un clima de tensión en la universidad, donde tanto estudiantes como personal administrativo buscan una solución rápida a este conflicto que afecta la convivencia dentro del campus.
Las autoridades universitarias aún no han dado una respuesta formal a estas denuncias, pero la presión de la comunidad universitaria sigue en aumento. Se espera que en los próximos días se tomen decisiones concretas al respecto.