La masiva llegada de juguetes chinos de bajo costo a las tiendas de casi todas las cuadras de Juliaca se ha convertido en una amenaza silenciosa para la salud de los niños. Esta situación podría agravarse durante la temporada navideña, cuando la venta de estos productos sin registro sanitario aumente de manera considerable.
Fiorela Luna Lima, coordinadora regional de la estrategia de metales pesados de la DIRESA Puno, advirtió que muchos de estos artículos importados contienen niveles de plomo que superan ampliamente los límites permitidos. Esto representa un riesgo serio e irreversible para los menores, ya que el plomo puede acumularse en el organismo hasta por 30 años.
La funcionaria señaló que la falta de controles adecuados permite que diversos establecimientos vendan juguetes y útiles escolares sin los registros sanitarios obligatorios. Muchos de estos productos ingresan al país sin cumplir las normas de seguridad diseñadas para proteger a la población infantil.
Los niños pueden absorber hasta el 50% del plomo que ingresa a su organismo, mientras que los adultos solo retienen alrededor del 10%. Esta diferencia provoca daños neurológicos severos en los menores, retrasos en el aprendizaje y deterioro del sistema nervioso, dependiendo del tiempo de exposición y la cantidad acumulada del metal.
Luna Lima exhortó a los padres a verificar que los juguetes cuenten con registro sanitario y a comprobar que no desprendan color al frotarlos. Si la pintura se transfiere a las manos, advirtió, es probable que los niños ingieran plomo al llevarse el objeto a la boca o chuparlo durante el juego.
Finalmente, mencionó estudios realizados en India, donde niños expuestos al desmantelamiento de baterías presentaron daños neurológicos graves. Esto demuestra que la contaminación por plomo no solo ocurre por contacto directo, sino también por inhalación. Por ello, pidió a las familias extremar las precauciones en estas festividades.
