La noche del último fin de semana, una intervención policial en Juliaca, inicialmente confundida con una acción irregular, terminó con la detención de dos presuntos delincuentes. Vecinos del lugar salieron de sus viviendas al escuchar el alboroto, generando una trifulca en medio de la confusión.
En un primer momento, los agentes policiales intervinieron un vehículo sospechoso en el jirón Huancané con San Agustín. El conductor, presuntamente armado y en estado de ebriedad junto con su copiloto, se negó a bajarse del auto. La situación escaló rápidamente, obligando a la Policía Nacional y a efectivos de servicios especiales a trasladarse al lugar.
Dentro del vehículo, las autoridades encontraron un arma de fuego, junto con otras pertenencias de valor. Algunos ciudadanos cuestionaron la intervención, alegando irregularidades. Sin embargo, la policía confirmó que los detenidos serían parte de bandas delincuenciales.
Tras un largo diálogo, el individuo fue retenido y trasladado a la dependencia policial. El vehículo, una camioneta Hyundai Creta de placa AVI-694, fue remolcado al no contar con las llaves. La identidad del conductor aún se desconoce, mientras las autoridades investigan el caso.
Algunos pobladores negaron la presencia de un arma de fuego en el vehículo, pero las autoridades insisten en que todo es materia de investigación. La fiscal de turno llegó al lugar, y uno de los detenidos fue reducido y subido a un patrullero.
Los detenidos fueron identificados como Blas Apaza Mamani (alias “Turry”) y Rubén Apaza Cahuana (alias “Chato”), presuntos integrantes de la banda criminal “Los Lechuzeros de Villa Hermosa”. Se les acusa de tenencia ilegal de armas y resistencia a la autoridad, mientras las investigaciones continúan para esclarecer los hechos.
