La familia de Santiago Felipe Leqque Mamani, de 58 años, exige justicia tras su muerte luego de ser atropellado en Puno. Denuncian que incluso antes de su deceso se emitió un extraño certificado de defunción y que la denuncia no figura en la fiscalía.
El accidente ocurrió el 3 de septiembre en la salida Cusco, a la altura de la segunda circunvalación. El vehículo Nissan era conducido por el policía Juan Carlos Quispe Ojuiro, de 28 años, quien fue detenido inicialmente, pero recuperó su libertad días después.
El hijo de la víctima, Alexander Leqque, relató que en el hospital les informaron primero que su padre tenía muerte cerebral y falleció recién el 7 de septiembre. Sin embargo, descubrieron que ya el mismo día del accidente figuraba un certificado de defunción emitido sin autorización familiar.
La familia desconoce quién solicitó ese documento, lo que refuerza las sospechas de irregularidades en el manejo hospitalario y judicial. Tampoco se les entregó copia oficial de las actas del accidente, lo que dificulta sus reclamos.
Cuando acudieron a la comisaría, les informaron que la denuncia había sido derivada a la fiscalía. Sin embargo, en el Ministerio Público se toparon con contradicciones, pues el caso fue trasladado entre distintos fiscales sin registro documentado ni avances visibles.
Ante este panorama, los deudos remarcan que el efectivo policial identificado sigue en libertad y sin sanción. La familia considera que el proceso refleja impunidad y encubrimiento, y por ello insiste en que la justicia actúe con celeridad y transparencia.
