El expresidente de las cuatro zonas, Antero Pimentel Esquivias señaló que la desorganización social en Juliaca ha resultado en la cancelación de la protesta contra la inseguridad ciudadana programada. Esta inacción otorga peligrosa tolerancia a la delincuencia en la provincia de San Román. La cancelación abre la puerta a más asesinatos, robos y extorsiones en una ciudad ya golpeada por la criminalidad organizada.
Pimentel lamenta la falta de unidad en la convocatoria por insuficiente tiempo para coordinar con los gremios. La gente perdió el entusiasmo para la movilización al momento de conformar una comisión de trabajo en la primera reunión. Las autoridades locales no cuentan con un plan de seguridad ciudadana según se establece claramente la Ley 27933 vigente en el país.
El alcalde y el gobernador regional presiden estos comités de seguridad sin presentar soluciones concretas a la población. La delincuencia, la corrupción y el robo se apoderan de Juliaca sin freno institucional alguno. Pimentel Esquivias afirma que los informes sobre combate exitoso de la inseguridad son inventados y no reflejan la realidad que viven los ciudadanos diariamente.
Denuncian maniobras políticas como pantalla
Así mismo declaró que las supuestas desarticulaciones de bandas criminales constituyen un engaño a toda la población según asegura el dirigente social. «Esto es pura pantalla, una mentira» afirmó categóricamente sobre los operativos policiales publicitados. La creación de mesas técnicas de componentes de seguridad busca traerse abajo la lucha genuina del pueblo contra la inseguridad ciudadana.
Estas maniobras políticas tapan actos irregulares y esconden la corrupción dentro de la Policía Nacional del Perú ya que no existe reorganización policial hasta el día de hoy pese a las denuncias y pedidos ciudadanos. Existe un silencio absoluto por parte de importantes figuras de representación política como el gobernador regional, los consejeros y los regidores de la zona.
El gobernador regional, los consejeros y los regidores no emiten ninguna declaración pública sobre la crisis de seguridad Esquivias indicó que la región está completamente olvidada según se siente especialmente en las calles de la ciudad de Juliaca. Esperar hasta el próximo año para organizar una protesta resulta ser muy tardío enfatiza Antero Pimentel Esquivias ante la gravedad de la situación actual.
Riesgo de mayor escalada delictiva
La ciudadanía le daría más tolerancia a la delincuencia con esta espera innecesaria y peligrosa para la población. Esta demora provocará muchos más asaltos, asesinatos y robos en toda la zona de San Román. Antero Pimentel Esquivias hizo un llamado a los dirigentes de diferentes provincias para unirse y enfrentar juntos la crisis de seguridad que afecta a toda la región.
Ellos deben formar una sola fuerza para rechazar la corrupción y los actos delictivos que afectan a Puno diariamente. El divisionismo actual solamente defiende intereses personales de cada grupo sin pensar en el bien común. La falta de organización social impide una respuesta efectiva contra la delincuencia que opera con total impunidad en las calles de la ciudad.
La cancelación de la protesta representa un revés significativo para la ciudadanía que exige seguridad y justicia inmediata. Pimentel Esquivias insiste en la urgencia de reorganizar la convocatoria antes que sea demasiado tarde para Juliaca. El fracaso de la movilización fortalece a los delincuentes que interpretan la desorganización ciudadana como carta libre para continuar sus actividades criminales sin consecuencias.
