La ciudad de Juliaca anuncia un paro preventivo de 24 horas hoy 30 de abril, convocado por diversas organizaciones sociales. La medida busca llamar la atención sobre la creciente inseguridad y la presunta complicidad de la policía en actos delictivos.
En una reunión multitudinaria, representantes de transportistas, comerciantes, educadores y ronderos acordaron la paralización. Pedro Quispe Quisocala, uno de los dirigentes, destacó la necesidad de un diálogo directo con el ministro del Interior y una reforma integral de la Policía Nacional.
La paralización abarcará toda la provincia de San Román. Si no se obtienen respuestas inmediatas, se planea extender el paro a 48 horas en toda la región de Puno, con la participación de 110 distritos y 13 provincias, la propuesta es este 14 y 15 de mayo.

Raúl Canaza, representante de las cuatro zonas de Juliaca, subrayó que la decisión es unánime y no habrá diálogo con intermediarios. “Solo aceptaremos una reunión con el ministro del Interior”, afirmó.
Las autoridades como el gobernador regional Richard Hancco y el alcalde de San Román, Óscar Cáceres, fueron criticadas por su inacción. Orlando Sanga Yampasi los calificó de “traidores e incapaces”, señalando su falta de planes concretos en seguridad ciudadana.
Mediante un oficio, se solicitó al director de la UGEL San Román suspender las clases para proteger a los estudiantes. La medida busca garantizar la integridad de los niños durante el paro.
La paralización será pacífica, sin afectar la propiedad privada ni la integridad física de los ciudadanos. No habrá transporte ni actividad comercial, y se espera una adhesión masiva de todos los sectores.

La inseguridad en Juliaca ha alcanzado niveles alarmantes, con frecuentes robos y asaltos. Los ciudadanos exigen soluciones inmediatas y una reestructuración de las fuerzas del orden.
El paro del 30 de abril es solo el primer paso. Si las demandas no son atendidas, los dirigentes no descartan una huelga indefinida. La población está decidida a luchar por su seguridad y bienestar.
La convocatoria ha generado gran expectativa y apoyo entre los habitantes de Juliaca. La movilización será un termómetro de la capacidad de respuesta del gobierno ante la crisis de seguridad.