El presidente de la urbanización Espinal de Juliaca, Walter Quispe Mamani, expresó la desesperación de los residentes ante la paralización del proyecto de pavimentación de pistas y veredas desde enero pasado.
La Municipalidad Provincial de San Román resolvió el contrato con la empresa constructora el 10 de septiembre. Los vecinos esperaban una constatación notarial ese día, pero las autoridades municipales y notariales no se presentaron al lugar acordado.
«Estamos muy preocupados porque las inclemencias de la lluvia ya se sienten, ya se notan», declaró Quispe Mamani. El dirigente vecinal teme que las calles se vuelvan intransitables durante la próxima temporada lluviosa que se aproxima.
El proyecto cuenta con un presupuesto de casi cuatro millones de soles que permanece intangible. Sin embargo, existe incertidumbre sobre si estos recursos podrían revertir a las arcas del Estado al finalizar el año fiscal actual.
Los costos de construcción han aumentado significativamente desde el inicio del proyecto. El cemento y el fierro registran precios más elevados que el año anterior, lo cual genera preocupación adicional entre los vecinos de la urbanización.
Las obras llevan nueve meses abandonadas, generando malestar en la población. Los residentes han amenazado con realizar nuevas protestas si no obtienen respuestas concretas sobre la fecha de reinicio de los trabajos de pavimentación.
La gerencia municipal no ha proporcionado un cronograma definido para la reanudación del proyecto. Los vecinos buscan una conciliación con la empresa original para evitar mayores retrasos en la ejecución de la obra vial.