La ciudad de Juliaca, en la provincia de San Román, se prepara para conmemorar un aniversario más de su patrona, la Virgen de las Mercedes. Según el historiador René Calsín, esta advocación mariana es la tercera patrona de la ciudad, precedida por Santa Cecilia y Santa Catalina. La designación de la Virgen de las Mercedes como patrona data de mediados del siglo XVIII.
La llegada del ferrocarril marcó un hito en la historia de Juliaca, dividiendo la ciudad en dos sectores. El pueblo nuevo, formado alrededor de la estación, adoptó a la Virgen de las Mercedes como su patrona, mientras que el pueblo viejo mantuvo a la Virgen de la Candelaria. Con el tiempo, la Virgen de las Mercedes se empoderó y se convirtió en la única patrona de toda la ciudad.
La primera festividad en honor a la Virgen de las Mercedes se celebró en 1889, según registros del historiador Dionisio Torres Juárez. José Catacora Solórzano, otro estudioso local, señala que fue la colonia arequipeña asentada en Juliaca quien propuso a esta virgen como patrona y probablemente donó la imagen. En sus inicios, la danza predominante era la de los morenos o morenada.
A lo largo de los años, la celebración ha experimentado significativos cambios. Inicialmente se realizaba una octava, que incluía eventos como la inauguración de la Capilla de la Merced en 1896 y la conclusión de su torre en 1905. Actualmente, la festividad presenta una mayor diversidad de danzas, incluyendo caporales, sikuris, waka waka, tinkus y llamerada, reflejando la evolución cultural de la región.