Un total de 6,858 estudiantes de secundaria y 150 familias de las provincias de Puno, San Román y Chucuito-Juli fortalecerán sus habilidades psicosociales para prevenir el consumo de drogas. Este esfuerzo es posible gracias a la adenda al convenio de cooperación interinstitucional suscrita entre la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) y la Dirección Regional de Educación Puno (DREP).
Gino Vilca, especialista del programa, explicó que, además de fortalecer las habilidades de los estudiantes, se están detectando casos de jóvenes en riesgo por el consumo de drogas. Estos casos son derivados a la Dirección Regional de Salud, donde un equipo de psicólogos brinda apoyo especializado para ayudar a los estudiantes afectados.
Como parte del acuerdo, Devida transfirió un presupuesto de S/353,306 para el 2025, lo que permitirá ejecutar el Programa Presupuestal de Prevención y Tratamiento del Consumo de Drogas (PTCD). Este programa incluye asistencia técnica y capacitación para 254 docentes tutores, quienes desarrollarán acciones preventivas durante las horas de tutoría a lo largo del año escolar.
Para garantizar la correcta aplicación de las estrategias preventivas, la DREP conformará un equipo técnico regional. Este equipo estará integrado por un coordinador, un asistente administrativo, personal de apoyo técnico, cinco facilitadores de prevención universal y dos facilitadores del programa “Familias Fuertes”, que trabajarán de manera coordinada para alcanzar los objetivos del programa.
Las instituciones educativas beneficiadas incluyen colegios emblemáticos como José Carlos Mariátegui Aplicación UNA, Industrial 32, María Auxiliadora, José Antonio Encinas, San Martín, Horacio Zevallos Gámez, Pedro Vilcapaza, Telesforo Catacora y María Asunción Galindo. Estas escuelas pertenecen a las Unidades de Gestión Educativa Local (UGEL) de Puno, San Román y Chucuito, y serán el foco de las acciones preventivas para proteger a los jóvenes de la región.