Diversas delegaciones de puneños se preparan para viajar este fin de semana a la ciudad de Lima con una serie de demandas y exigiendo la renuncia de Dina Boluarte, el cierre del Congreso de la República, la conformación de una Asamblea Constituyente, elecciones generales y justicia para las víctimas del actual gobierno.
Desde la zona sur de la región, la Organización de Mujeres Bartolina Cisa ha confirmado su traslado a la capital para el sábado 22 de julio. Un aproximado de 20 mujeres aymaras se movilizarán con la intención de luchar por un futuro mejor para sus hijos, según declaró la presidenta de la organización, Edith Calizaya.
Por su parte, el magisterio puneño también se sumará a las protestas en Lima el 22 de julio, los dirigentes de cada base están armando la lista de maestros que participarán en la movilización, mientras que aquellos que permanezcan en Puno continuarán con manifestaciones en el centro de la ciudad.
En el norte de la región, la Asociación de Mártires y Víctimas del 9 de enero de Juliaca anunció que el 24 de julio se trasladarán a Lima para buscar justicia por la muerte de sus familiares. Además, también pedirán que las carpetas fiscales retornen a Puno.
Estas movilizaciones reflejan el creciente descontento y la demanda de cambios en la región de Puno, donde diversos sectores de la sociedad están uniendo fuerzas para hacer oír sus reclamos y buscar soluciones a los problemas que enfrenta la población.
