El quincenario Hildebrandt en sus Trece reveló la estrecha relación entre el empresario Félix Rosenberg conocido como el rey de los casinos y tragamonedas y el primer ministro, Alberto Otárola quien trabajó para él por más de 20 años además de tener otros tres hermanos a su servicio.
El periodista Eloy Marchán fue en busca del empresario, quien le reveló que posee un hotel en Puno, además de poseer una concesión de Litio. Además, cuando se le preguntó por Puno, lo definió como “el gran problema” y confesó que se ha visto muy afectado por las medidas tomadas en la región.
El empresario ha estado en el negocio durante décadas y ha expandido su imperio económico a Chile, Ecuador y otros países, pero simultáneamente ha maniobrado para no pagar impuestos en el Perú, para lo cual usó los servicios de Otárola y varios de sus parientes.
Todo lo anterior de acuerdo a la investigación más reciente del semanario; sin embargo, el empresario se hizo conocido cuando fue uno de los peruanos implicados en los Panamá Papers y en un supuesto lobby en el congreso para evitar el pago de tributos.


