La empresa colombiana Orocom ha estafado a empresarios de Puno y otras tres regiones del país, pero también a comuneros y pobladores que siguen sin internet. Los afectados, a los que se les adeuda alrededor de 20 millones de soles, han pedido una reunión con el presidente José Jerí en Puno para que conozca la realidad del proyecto de fibra óptica, que terminó como un “elefante blanco”.
Tras revelarse que Orocom, que tenía a su cargo la instalación de internet en colegios, postas y Comisarías de la región Puno, no pagó a sus proveedores y tampoco cumplió con las comunidades que alquilaron sus terrenos para la instalación de antenas, también se evidenció que esta empresa habría actuado con el aval del Ministerio de Transportes y Comunicaciones.
La abogada de un grupo de 17 proveedores afectados a nivel nacional, Mónica Yaya, dijo que la empresa los ha estafado, porque de manera tendenciosa mintieron a comerciantes, empresarios, incluso amas de casa.
“Orocom ha recibido adelantos periódicos del nivel central, es decir, ellos han recibido dinero del Estado, pero no han pagado a sus proveedores”, sostuvo.
Señaló que, al hacer llegar este reclamo al MTC, estos les dijeron que se trataba de una “pelea entre privados”; sin embargo, al revisar las cláusulas del contrato suscrito entre Orocom y Transportes, se reveló que el Estado debía supervisar el pago a los proveedores, pero no lo hicieron.
Ante ello, han enviado una carta al presidente José Jerí, pidiéndole una reunión junto al ministro de Transportes en la región Puno, para que informe las acciones a realizar ante el incumplimiento no solo en la región altiplánica, sino también en Junín, Tacna y Moquegua.
A ello se suma que, la empresa aprovechando el silencio del nivel central, interpuso una medida cautelar para que el Estado no ejecute la carta fianza que Orocom entregó como garantía para el cumplimiento de sus obligaciones.
