Adolfo Paredes Aracayo, poblador de la provincia de Huancané, volvió a trasladarse hasta Juliaca para denunciar serias irregularidades en la ejecución de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR), una obra valorizada en 42 millones de soles que permanece paralizada con apenas un 46% de avance.
La PTAR debía culminarse en mayo de 2024; sin embargo, la empresa ejecutora, Consorcio Petar, solo ha gastado 3.5 millones de los 18 millones asignados para este año, lo que —según el denunciante— evidencia una deficiente capacidad de ejecución y un perjuicio directo para la población altiplánica.
Paredes señaló que el Consorcio Petar, integrado por Sigma SAC y Reymann Contratistas, también ejecuta proyectos en Juliaca, Juli y Desaguadero. En esta última localidad, indicó, la obra habría sido abandonada por las mismas empresas que operan actualmente en Huancané.
Mientras tanto, los habitantes de Huancané enfrentan constantes cortes de agua. Algunos sectores llevan tres días sin servicio y otros acumulan más de un mes sin acceso al recurso, pese a que los recibos de cobro continúan llegando con normalidad por parte de EPS nor Puno, entidad encargada de la obra cuestionada.
El denunciante también criticó al alcalde provincial Valerio Tapia por la aparente falta de fiscalización, pese a que la empresa supervisora ya consumió cerca de 4 millones de soles. Entre ese monto, afirmó, se incluyen 700 mil soles del presupuesto destinado inicialmente para acciones COVID, que fueron derivados a supervisión sin garantizar avances reales.
Finalmente, Paredes recordó que especialistas advirtieron que el proceso de licitación estaba mal elaborado durante la gestión del exalcalde Arturo Álvarez. Aun así, las observaciones técnicas fueron ignoradas y se dio luz verde a un proyecto valorizado en 63 millones de soles, iniciado en mayo de 2023 y que hoy se encuentra en crisis por su bajo nivel de ejecución.
