Más de dos mil familias campesinas de Samán, Azángaro y Pusi ven peligrar sus cosechas porque el proyecto de irrigación tecnificada, cuya inversión técnica supera los tres millones de soles, sigue paralizado desde enero, el retraso afecta directamente a quienes ya sufren las sequías.
Victoriano Quispe Sucasaca, presidente del comité central de riego tecnificado, afirma que las autoridades regionales y el PRORRIDRE se responsabilizan mutuamente mientras la falta de acción deja sin agua a cientos de agricultores que esperan desde hace meses la aprobación del expediente técnico.
El dirigente describe que la promesa de iniciar el estudio en marzo nunca se cumplió, afirma que el gobernador regional Richard Hancco Soncco asegura que el tema está avanzando, pero la realidad muestra que la gestión queda estancada por la falta de voluntad entre las oficinas involucradas.
El avance técnico en las comunidades ya es suficiente, Quispe Sucasaca refuerza que los terrenos están saneados en un noventa y cinco por ciento y recalca que el único obstáculo es la decisión que debe tomar el equipo de PRORRIDRE para dar el siguiente paso.
Ante la pasividad del gobierno regional, los agricultores organizan una marcha de sacrificio, buscan exigir que el proyecto arranque para garantizar agua y futuro a miles de familias rurales que dependen de sus cultivos y que ya viven con el impacto de la sequía.
Victoriano Quispe Sucasaca hace un pedido público al gobernador regional para que ordene a PRORRIDRE ejecutar el expediente técnico, el dirigente sostiene que el porvenir agrícola de tres distritos queda suspendido por una decisión que las autoridades pueden y deben tomar hoy.


