El Órgano de Control Institucional de la Municipalidad Provincial de Puno detectó que la empresa contratista sigue trabajando en la obra vial de los jirones Benjamín Pacheco Vargas, Luz Victoria y vías conexas del barrio San Miguel, aunque ya venció el plazo contractual, lo que podría afectar la entrega oportuna y la aplicación de penalidades por demora.
El informe revela que la obra debió culminar el 22 de junio de 2025, pero el contratista ejecutor continúa con trabajos como juntas de asfalto, pintado de marcas sobre el pavimento y concreto en veredas, lo que pone en riesgo la finalidad pública y la entrega a los vecinos de la zona.
La comisión de control también halló que el supervisor de obra no garantizó la presencia del especialista en seguridad y salud en el trabajo, hecho que incumple las obligaciones del contrato y puede evitar la aplicación de sanciones al responsable, lo que afecta la seguridad de los trabajadores.
Durante la inspección física, los encargados del control constataron la ausencia del personal clave del contratista supervisor, situación que contradice lo establecido en el expediente técnico y los contratos firmados para la ejecución y supervisión de la obra.
El informe advierte que la falta de control y la ausencia de especialistas pueden afectar la calidad de la obra, así como la seguridad de quienes trabajan en la construcción y de los futuros usuarios de las vías intervenidas en el barrio San Miguel.
Las autoridades de la municipalidad deben informar en un plazo de cinco días las acciones que adoptarán para corregir estos problemas, la Contraloría recomienda medidas preventivas y correctivas para asegurar la continuidad y el buen resultado del proyecto.
El jefe del Órgano de Control Institucional, Jerson Waldhyr Gonzales Guevara, firmó el informe y notificó al alcalde Javier Ponce Roque, quien debe responder con la documentación de sustento sobre las acciones tomadas para garantizar la transparencia y la eficiencia en la gestión de la obra pública.
