El padre de los menores, identificado como Alan P., sabía del paradero de Esther Mamani Huacani, quien era buscada por su madre Guillermina Huacani Churata; la joven desapareció hace un año y siete meses, dejando a sus tres hijos al cuidado de su madre en Puno.
Guillermina reveló este detalle angustioso, que Alan P. mantuvo comunicación con Esther Mamani pero nunca informó a la familia sobre su ubicación, mientras ella desesperadamente buscaba a su hija.
Esther Mamani Huacani, de 28 años, abandonó su hogar sin dejar rastro; la joven solo mantuvo comunicación con su madre hasta febrero de este año y después, el silencio fue absoluto. Los niños, de diez, siete y cuatro años, quedaron bajo el cuidado de su abuela materna.
El niño mayor apoya a su abuela en la venta de alimentos en el mercado local para subsistir, mientras Guillermina Huacani enfrenta sola la responsabilidad económica y emocional de los tres menores.
Padre abandonó a sus hijos antes de 2022
Alan P. abandonó a su familia mucho antes de que Esther desapareciera; Guillermina declaró que él nunca se hizo responsable del cuidado y sustento de los niños desde antes del año 2022, por lo cual ella asumió completamente las obligaciones que el padre evadió durante años.
Alan P. habría salido de prisión el pasado 16 de julio y contactó a Guillermina después de que ella hiciera público el caso; él llamó para indicar que iría a conversar personalmente sobre la situación de los pequeños, por lo cual la madre de Esther espera que el padre asuma finalmente sus responsabilidades.
Esther Mamani Huacani no ha enviado apoyo económico para sus hijos desde que se marchó; su madre Guillermina afirma que solo recibió quince soles en junio por su cumpleaños, a través de otra hija. La ausencia total de recursos agrava dramáticamente la situación económica familiar.
Preocupación por ubicación en zona de riesgo
Guillermina Huacani solo sabe que su hija le mencionó estar en Puerto Maldonado, zona que presenta riesgos significativos; existe una preocupación real de que algo grave le haya sucedido a Esther en dicho lugar. Las circunstancias de la desaparición y el silencio prolongado generan alarma en la familia y autoridades locales.
Las personas interesadas en apoyar a la familia pueden llamar al número 971 623 895 para ofrecer ayuda inmediata; Guillermina solicita cualquier tipo de colaboración que permita sostener a los tres menores abandonados. La comunidad puneña puede marcar la diferencia en la vida de estos niños que enfrentan abandono y carencias múltiples.


