Más de un centenar de familias que residen en la parte posterior del penal de Yanamayo en Alto Puno, enfrentan la imposibilidad de acceder a servicios básicos de agua y desagüe, una situación que se mantiene sin respuesta efectiva por parte de las autoridades competentes del distrito y la provincia de Puno desde el 2020.
César Ticona Cruz, representante de los habitantes del sector, solicitó formalmente a la empresa prestadora la instalación del servicio; no obstante, recibió como respuesta la imposibilidad de ejecutar obras sin el sustento legal que solo puede otorgar la Municipalidad Provincial o la municipalidad menor.
La ausencia de una habilitación urbana se convirtió en el principal obstáculo para que el Centro Poblado de Alto Puno logre el reconocimiento oficial ante la EPS EMSA Puno, entidad que condiciona cualquier ampliación de redes a la presentación de este documento que certifica la formalidad de la urbanización.
Pese a la carencia del servicio, EMSA Puno realiza inspecciones periódicas en la zona para detectar conexiones irregulares, sin que estos operativos incluyan propuestas que resuelvan la demanda de los vecinos, quienes manifestaron su disposición para colaborar técnicamente en el desarrollo e implementación del proyecto de ampliación.
Ticona cuestionó la falta de voluntad política de los funcionarios municipales y señaló que, mientras se argumenta escasez presupuestal, se destinan recursos a otras áreas que no responden a necesidades prioritarias de la población más vulnerable.
Los residentes del sector realizan un llamado urgente a las autoridades locales y provinciales para que atiendan esta demanda que compromete directamente la salud y el derecho a condiciones de vida dignas en una zona habitada desde hace más de cinco años.
