La regidora de la Municipalidad Provincial de San Román, Leidy Vanessa Quispe Apaza fue elegida por la cuota joven, para representar durante tres años a la juventud. Sin embargo, su gestión genera dudas tras denuncias de desplante, desinterés hacia el sector, nula fiscalización, pero si percibió más de 120 mil soles por dietas mensuales de 3,400 soles como regidora, sin mostrar logros tangibles para el sector que representa.
Y peor aún, Quispe Apaza desconoció la fecha que se celebra el Día de la Juventud, asegurando que es el 21 de septiembre, cuando el calendario oficial marca el 23. Este error, sumado a su ausencia en actividades clave, alimentó críticas sobre su eficiencia y compromiso.
Mientras la regidora se defiende y asegura coordinar con la Sugerencia de Cultura y Deporte las diferentes actividades, que según ella se preparan para el día de la juventud.
En respuesta, El presidente del Consejo Provincial de la Juventud, Luis Condori Yapo, desmintió sus declaraciones aclarando que las actividades, como el concurso de ajedrez y clases de quechua y demás, ya se desarrollaban desde el 1 de septiembre. La regidora no participó en ninguna, dejando en evidencia su desconexión con las iniciativas juveniles.
En otro momento la regidora señaló que las invitaciones nunca le llegaron, por lo cual la regidora reveló no asistió. Hecho que también fue desmentido, ya que aseguran que las invitaciones fueron por WhatsApp, y que ella misma confirmar su participación. «Siempre respondió que iría, pero nunca llegó», afirmó Condori Yapo, cuestionando su falta de acción.
El proyecto de la Casa de la Juventud sigue estancado. Aunque el perfil técnico avanza, falta apoyo municipal y de Quispe. «Sin su respaldo, no hay progreso», lamentó Condori, destacando que 10 organizaciones juveniles esperan respuestas que nunca llegan.
Quispe Apaza, admitió que en tres años no aprobó ninguna ordenanza ni proyectos concretos. «Estoy avanzando con el asesor», justificó, pero los jóvenes exigen resultados, no promesas. Su gestión se reduce a coordinaciones sin ejecución, generando frustración en el sector.
El Consejo Regional de la Juventud también la criticó. «Desconoce nuestra existencia», señalaron, tras confirmar que nunca asistió a sus convocatorias. Quispe argumentó que «no le llegaron las invitaciones», pero evitó explicar por qué no fiscalizó activamente como parte de su rol.


