La reciente denuncia presentada ante la Corte Penal Internacional por la Asociación Pro Derechos Humanos (Aprodeh), la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) y Harold Forsyth contra la presidenta Dina Boluarte y varios ministros por presuntas violaciones sistemáticas de derechos humanos ha generado un impacto positivo entre los familiares de las víctimas, esta acción ha revitalizado la esperanza de alcanzar justicia para aquellos afectados por la violencia en las protestas.
Raúl Samillán Sanga, hermano de un médico asesinado durante las protestas en Juliaca y presidente de la Asociación de Víctimas y Mártires del 09 de Enero, expresó su apoyo a la iniciativa. Celebró la denuncia contra Boluarte y afirmó que la presidenta está disfrutando sus últimos días en libertad, señalando un posible fin a su mandato.
Samillán Sanga también destacó la importancia de las denuncias presentadas por ciudadanos y organizaciones como Aprodeh. Subrayó la necesidad de que esta organización internacional actúe ante las violaciones de derechos humanos en el país. Además, anunció una movilización masiva programada para el 28 de julio, con la intención de fortalecer la presión para la salida de Boluarte y sus ministros del poder.
Finalmente, Samillán Sanga instó a la presidenta a renunciar y dejar de causar daño, sugiriendo que sus actuales actividades solo son un preludio a su posible encarcelamiento. Enfatizó que la movilización del 28 de julio será un momento crucial en la lucha por la justicia, reflejando la determinación de los peruanos para organizarse y exigir la rendición de cuentas por las violaciones de derechos humanos.