La continuidad del proyecto de agua y alcantarillado para la provincia de San Román, está en riesgo. El dirigente Crisóstomo Benique, ha pedido la urgente desactivación de la Unidad Coordinadora del Proyecto (UCP), por la falta de resultados.
Explicó que pese a haberse incrementado el presupuesto inicial de esta mega obra, los problemas persisten, principalmente en el retraso del proyecto. Ahora, en la segunda etapa se iniciará el cambio de tuberías y otros componentes.
“Si hubieran empezado por la tercera o cuarta etapa, no hubiéramos tenido estos problemas, pero no han trabajo, por eso la población pide la desactivación de la UCP”, reiteró.
Dijo que el mismo alcalde de San Román, Óscar Cáceres, ha pedido la nulidad de dicha unidad, porque no ha demostrado trabajo, “dicen que tienen profesionales idóneos, pero no es así”, agregó el dirigente.
Benique, acusó a algunos dirigentes juliaqueños de aprovecharse de la situación, alquilando sus viviendas para el funcionamiento de la UCP y buscando puestos de trabajo para sus familiares.
“Están pidiendo otros favores. No luchan realmente por el proyecto y es ahora donde más necesitamos que se concluyan todas las etapas”, concluyó.


