La provincia de Sandia se encuentra completamente incomunicada tras el colapso de un puente y varios tramos de carretera debido a intensas lluvias y la crecida del río. Según declaró León Garrido Cáceres, exdirigente sandino, a Pachamama Radio, los seis distritos de la provincia, incluyendo Alto Inambari, San Juan del Oro y cuencas aledañas, están sin acceso, electricidad ni señal telefónica.
El entrevistado denunció el aparente desinterés del Gobierno Regional de Puno ante esta emergencia que afecta a más de 80 mil habitantes. “Me parece que este señor está gobernando en otro sitio. Por lo menos me parece que gobierna para la zona sur de nuestra región de Puno”, expresó Garrido refiriéndose al gobernador Richard Hancco.
La situación resulta más alarmante considerando que en 2018 ocurrió un desastre similar, cuando varias plataformas fueron arrastradas por el río. A pesar de declararse emergencia y solicitarse intervención para defensas ribereñas y mantenimiento vial, poco se ha hecho desde entonces, según el entrevistado.
Garrido Cáceres, criticó duramente la respuesta de Defensa Civil, calificándola como “un saludo a la bandera” y cuestionando la utilidad de enviar frazadas, toldos o herramientas manuales cuando lo que se necesita urgentemente es maquinaria pesada y combustible para restablecer las vías afectadas.
Los productos de primera necesidad ya escasean en la zona afectada, con incrementos de precios entre 20% y 30%. Esta situación agrava las condiciones de vida de los pobladores, que enfrentan riesgos sanitarios y dificultades para abastecerse de alimentos mientras permanecen aislados.
El exdirigente señaló la necesidad inmediata de implementar un puente aéreo para asistir a la población afectada, así como realizar evaluaciones mediante drones para determinar el alcance real de los daños. La falta de respuesta del consejero regional, que “brilla por su ausencia”, complica aún más la gestión de esta emergencia.
Garrido Cáceres, quien logró llegar a Juliaca después de permanecer atrapado por más de una semana debido a los constantes derrumbes, lamentó el abandono de la provincia a pesar de su importancia económica: “Tenemos para llenarnos la boca que de ahí sale el mejor café del mundo, eso sí, solo para darnos hisopos, pero para hacer por la provincia, nada”.
