La congresista de la República, Susel Paredes, consideró que hombres y mujeres no debemos retroceder en los logros obtenidos, manteniendo la claridad sobre la necesidad de proteger los derechos humanos, al trabajo digno y al respeto, frente a las amenazas de grupos radicales en el Congreso.
En Razón Libre de Pachamama radio, señaló que el Congreso enfrenta una mayoría de ultraderecha con tendencias neofascistas. Esta fuerza política se opone a proyectos que benefician a la población como los derechos de la mujer, generando preocupación por los avances logrados en la igualdad de género.
Ante esta situación, la congresista dijo que solo nos queda resistir y defender los derechos humanos, y la dignidad sin miedo a represalias.
Denunció que es objeto de intentos de sanción por opinar sobre el intento de inhabilitar a los miembros de la Junta Nacional de Justicia, y considera una venganza política la inhabilitación de Inés Tello.
Aunque finalmente sólo suspendieron a dos miembros de la Junta, evitando un «desastre» mayor, instó a mantenerse firmes en las convicciones democráticas. Advirtió que la derecha «bruta y achorada» es provocadora, citando los insultos y hostigamientos sufridos por la periodista Rosa María Palacios.
La parlamentaria dijo que estamos viviendo una repetición del régimen autoritario de Alberto Fujimori en los años 90. Recordó cómo Fujimori llegó al poder máximo y luego cayó preso, instando a mantener la resistencia hasta revocar su controversial indulto humanitario.
Señaló que hay pruebas contundentes de que Fujimori goza de buena salud, contrario a los argumentos para su excarcelación. Aseveró que se le ha visto de compras, promocionando sus redes sociales y asistiendo a reuniones sin necesidad de oxígeno.