La suscripción del convenio 025 para el financiamiento de agua potable en Puno se encuentra en proceso de resolución tras 45 días de negociaciones entre el Ministerio de Vivienda, EMSAPUNO y la municipalidad provincial. Ricardo Álvarez González, gerente municipal, confirmó que el retraso obedece principalmente a la necesidad de cerrar proyectos duplicados que generaron observaciones técnicas del ente rector nacional.
EMSAPUNO enfrenta cuestionamientos por la gestión de múltiples proyectos que presentan duplicidad, situación que ha motivado reuniones semanales para resolver las observaciones ministeriales. El gerente municipal explicó que se han realizado dos reuniones esta semana para avanzar en el cierre de estos proyectos conflictivos y proyecta que el convenio se suscriba el próximo mes, dando inicio a la segunda etapa de financiamiento y ejecución.
La problemática del agua potable se agravó con las deficiencias del servicio en grandes sectores de la ciudad, especialmente por roturas de tuberías durante la ejecución de obras públicas. Álvarez González reconoció que el problema de fondo radica en la insuficiente disponibilidad de agua para atender la demanda ciudadana, situación que el convenio 025 busca solucionar de manera integral.
El hospital de Alto Puno recibió factibilidad para su construcción, pero enfrenta serios problemas de abastecimiento hídrico, evidenciando la urgencia de las obras de agua potable en la zona norte. El gobernador regional decidió financiar un plan de contingencia específico para esta área, reconociendo que ni la empresa EMSAPUNO ni la municipalidad cuentan con presupuesto suficiente para resolver la crisis.
La zona norte de Puno, incluyendo Alto Puno, será beneficiada con el plan de contingencia regional que complementará las acciones del convenio 025 una vez suscrito. Las autoridades municipales mantienen coordinación permanente con EMSAPUNO para garantizar la dotación básica de agua al hospital mientras se ejecutan las obras definitivas del proyecto integral.
El Banco Mundial confirmó durante su visita la necesidad crítica del proyecto hídrico para la ciudad de Puno, respaldando las gestiones para concretar el financiamiento internacional. Álvarez González proyecta que tras la firma del convenio el próximo mes se reactivarán las reuniones con el Banco Mundial y el Ministerio de Vivienda, aunque reconoció que aún no existe una fecha exacta para la implementación definitiva del ambicioso proyecto de agua potable.