Una madre cruzó el lago Titicaca arriesgando su vida por dos horas para estar junto a su hija herida durante los conflictos universitarios del 24 de junio. Rebecca Chalco, originaria de la isla Anapia en Yunguyo, enfrenta una odisea familiar tras los incidentes que afectaron a su hija Kimberly Chávez en la ciudad universitaria de Puno.
Los padres de Kimberly Chávez denuncian que las autoridades médicas minimizan el estado de salud de la joven estudiante. Rebecca Chalco expresó su indignación ante el tratamiento recibido por su hija, quien presenta dolencias en la cadera y graves secuelas emocionales tras el incidente donde un mueble de metal fue empujado sobre ella.
La estudiante, reconocida como alumna destacada desde su infancia en la isla Anapia, siempre demostró liderazgo académico y compromiso social. Según su madre, Kimberly ha luchado constantemente por sus compañeros sin victimizarse, manteniendo una postura de reclamo justo por todos los estudiantes afectados.
El 26 de junio, las autoridades hospitalarias dieron de alta a Kimberly sin realizar una evaluación médica completa. Rebecca Chalco considera que esta decisión busca minimizar la gravedad del caso, ya que su hija continúa experimentando dolor físico y presenta síntomas de trauma psicológico severo.
La familia Chávez Chalco esperaba que la universidad cumpliera su compromiso de realizar estudios médicos especializados en una clínica particular. Sin embargo, Rebecca Chalco decidió asumir los gastos médicos por cuenta propia ante la falta de coordinación institucional para atender adecuadamente a su hija.
La travesía desde Anapia hasta Puno representa un sacrificio económico y físico considerable para esta familia de una zona vulnerable. Durante el viaje, enfrentaron fuertes vientos en el lago Titicaca que casi provocan un accidente, evidenciando los riesgos que asumen para buscar justicia.
Rebecca Chalco manifiesta que su hija presenta síntomas de estrés postraumático, incluyendo insomnio y episodios donde grita pidiendo auxilio. La madre solicita apoyo de la población para costear el tratamiento psicológico que requiere Kimberly tras el impacto emocional del incidente universitario.
La madre advierte que tomará acciones legales si las autoridades universitarias no cumplen sus compromisos. Rebecca Chalco exige que no minimicen lo ocurrido con su hija y demanda el cumplimiento de los acuerdos establecidos, manifestando su desesperación emocional ante la situación que atraviesa su familia.
