El exdirigente de la ciudad de Juliaca, Antero Pimentel alertó sobre el grave problema de inseguridad que atraviesa la ciudad debido a la proliferación de locales nocturnos ilegales y la aparente inacción de las autoridades municipales ante esta situación.
Pimentel señaló que los regidores municipales no están emitiendo las ordenanzas necesarias para combatir estos establecimientos; por el contrario, estos centros de entretenimiento nocturno continúan multiplicándose en diferentes sectores de la ciudad, generando un ambiente de impunidad que afecta directamente la seguridad ciudadana.
El ex dirigente citó como ejemplo específico un local ubicado en el jirón 8 de Noviembre con Piérola. Este establecimiento fue cerrado por los vecinos organizados, sin embargo, posteriormente reabrió sus puertas con total normalidad, mientras otros comerciantes formales deben cumplir estrictos requisitos para funcionar.
Según Pimentel, existe la sospecha de que organizaciones vinculadas a estos locales mantienen reuniones con autoridades municipales. El dirigente sugiere que estas reuniones podrían involucrar el pago de sobornos o «cupos», especialmente después de que se descubriera a serenos municipales recibiendo dinero de manera irregular.
Cada establecimiento nocturno estaría pagando aproximadamente cinco mil soles mensuales, según las estimaciones del ex dirigente cuestiona abiertamente el destino final de este dinero, sugiriendo que beneficia a personas no identificadas dentro del aparato municipal, lo que configuraría un «negocio redondo» de corrupción.
Ante esta problemática, Pimentel hizo un llamado directo a los vecinos para que se organicen nuevamente; este dirigente considera que las autoridades municipales no tomarán acciones concretas porque priorizan otros intereses, por lo que la comunidad debe asumir un rol protagónico en la solución.
El ex dirigente también criticó duramente la denominada «mesa técnica» de seguridad ciudadana, calificándola como incoherente recordando que las promesas de asignar 174 efectivos policiales adicionales no se cumplieron, mientras las autoridades parecen estar en «período de descanso» respecto a sus responsabilidades de seguridad.
Finalmente, Pimentel propuso organizar una movilización masiva contra el alcalde, similar a la que se realizó en el año 2020. El objetivo sería exigir el cierre inmediato de todos los locales nocturnos ilegales, aunque reconoció que algunos vecinos, en su desesperación, han sugerido medidas más drásticas.