Indignación en Juliaca por el deplorable estado de las calles céntricas Jirón Apurímac y Micaela Bastidas. Comerciantes denuncian que los enormes huecos impiden el tránsito y perjudican su actividad económica. La población exige a las autoridades una pronta solución ante la falta de mantenimiento vial en esta importante zona comercial de la ciudad.
Vecinos y comerciantes del Jirón Apurímac, Micaela Bastidas y calles adyacentes expresan su profundo malestar debido a la dificultad en la circulación de vehículos y peatones, afectando directamente la descarga de mercaderías para los negocios de la zona. Esta situación genera pérdidas económicas y frustración entre los trabajadores.
Una comerciante local declaró que los huecos existen desde hace meses y han empeorado con las lluvias. El agua acumulada en los baches los hace más profundos y peligrosos. Esta condición impide que puedan realizar sus labores de carga y descarga de mercancías con normalidad. Los ciudadanos se sienten abandonados por las autoridades.
La zona afectada, que incluye también el Jirón Tumbes, es un importante centro comercial con gran afluencia vehicular y peatonal. A pesar de ser una arteria principal, las vías se encuentran llenas de agujeros. Los comerciantes se instalan diariamente para vender sus productos, pero la infraestructura deficiente obstaculiza su trabajo.
Los ciudadanos cuestionan la falta de inversión en el mantenimiento de estas vías públicas esenciales. Se recuerda que las autoridades destinaron fondos para viajes, pero no para arreglar las calles. Esta situación genera indignación y un llamado urgente a la acción por parte de los responsables.
Ante la falta de respuesta, los habitantes de la zona hacen un llamado enérgico a las autoridades. Piden que se realicen trabajos de reparación, aunque sea de forma provisional, para permitir el tránsito y reactivar la economía local. La paciencia de los comerciantes se agota ante los perjuicios diarios.