Este martes, la provincia de San Román vivió una jornada trágica con un segundo incendio de menor magnitud en la Urbanización 28 de Julio, específicamente en los jirones Juli y Puno. El siniestro consumió por completo el tercer piso de una vivienda de ambientes prefabricados, aparentemente a causa de una fuga de gas que desencadenó el fuego, el cual no pudo ser controlado a tiempo.
Los vecinos, alarmados por el incidente, llamaron tanto a los bomberos como a otras autoridades. Sin embargo, el personal estaba abocado a combatir un incendio de grandes proporciones que también se registraba simultáneamente en el jirón Piérola de la ciudad de Juliaca. Debido a esta situación, solo unos pocos efectivos de serenazgo y agentes de la Policía Nacional pudieron acudir al lugar. Con la colaboración de los propietarios de la vivienda, quienes utilizaron baldes de agua, el incendio fue sofocado después de largos minutos, aunque ya había destruido todos los bienes de las casas prefabricadas, que al parecer albergaban una cocina.
Aunque los propietarios no pudieron precisar el origen exacto del fuego, se presume que se debió a una manipulación incorrecta del balón de gas. La falta de personal y la escasez de agua dificultaron el control de las llamas, que redujeron todo a cenizas. A pesar de los esfuerzos realizados, se logró apagar el incendio y retirar una gran cantidad de bienes que también estaban a punto de incendiarse.
Las autoridades competentes han instado a la población a revisar periódicamente las conexiones de gas y las instalaciones eléctricas en sus hogares, dado que la mayoría de los incendios se deben a fallos en estos sistemas. La prevención y el mantenimiento adecuado pueden evitar tragedias similares en el futuro.