El mediocampista Piero Quispe expresó que le dolió no ser convocado a la Selección Peruana bajo el mando del director técnico Óscar Ibáñez durante octubre pasado. El jugador del Sydney FC de Australia declaró en L1 Max que recibió una llamada telefónica con justificaciones contradictorias sobre su exclusión de la lista oficial. El futbolista de 23 años atraviesa un buen momento en el fútbol australiano tras su préstamo desde Pumas de México, donde demuestra regularidad y adaptación al exigente cambio de horario.
La explicación oficial indicaba falta de continuidad en su club, pero Quispe cuestionó esa versión al comparar su situación con otros futbolistas convocados. «Me llamaron porque, supuestamente, no tenía continuidad. No dije nada, pero me dolió, porque sí la tenía», señaló el mediocampista formado en Universitario. Al revisar la lista oficial identificó a 5 jugadores sin la misma regularidad que él mostraba en ese momento con el conjunto mexicano antes de su cesión al fútbol australiano actualmente.
El exjugador crema reconoció que el episodio le generó tristeza inicial, pero transformó esa decepción en motivación para elevar su rendimiento profesional. «Al ver la lista noté que había jugadores que no contaban con la misma regularidad. Eso, sin embargo, me ayudó a mejorar», expresó Quispe. El volante pasó de recibir respaldo constante bajo Juan Reynoso a quedar marginado con la actual dirección técnica, situación que no comprende totalmente pero respeta las decisiones del cuerpo técnico.
Salida forzada de México rumbo a Australia
Pumas de México obligó la salida del mediocampista peruano para liberar su cupo de extranjero y contratar a otro jugador de origen internacional. «Extraño mucho a México, mi hija es de allá, no me quería ir, pero me obligaron a salir», confesó el volante ante los medios. La decisión fue un baldazo de agua fría para Quispe, quien mantiene vínculos familiares en territorio azteca pero no guarda rencor hacia la institución mexicana que sigue siendo su propietaria oficialmente.
La elección de Australia surgió tras analizar cuidadosamente la propuesta con su familia y entorno cercano durante ese complejo proceso de transición profesional. «Hablé con mi entorno y les dije que, si había una posibilidad de estar en un lugar donde iba a estar bien, la tomaría», señaló. Sydney FC le proporcionó facilidades para aprender inglés con un profesor particular, ayudándolo a superar la barrera idiomática que inicialmente representó un desafío importante durante sus primeras semanas en el país oceánico.
El cambio de horario con más de 15 horas de diferencia afectó inicialmente al futbolista peruano, quien ahora se siente completamente adaptado a la vida australiana. «Muchos piensan que la liga aquí es fácil, pero la intensidad es buena y eso me ayudará a crecer», afirmó Quispe ante las críticas recibidas. El mediocampista espera estar convocado para la próxima fecha doble de Eliminatorias, trabajando arduamente para recuperar su lugar en el combinado nacional y posteriormente regresar a Pumas mejorado profesionalmente.
