La inseguridad en Puno preocupa a los ciudadanos, quienes sienten que los recientes hechos violentos, como balaceras y homicidios, han superado el límite de lo tolerable. Amador Núñez, presidente del Frente de Organizaciones Populares, advirtió que la situación en la región, especialmente en localidades como Putina y La Rinconada, es alarmante.
Núñez indicó que la población se siente desamparada por las autoridades, quienes, según el dirigente, no están actuando de manera efectiva para combatir la delincuencia. Este sentimiento de abandono ha crecido con cada incidente que queda sin respuesta concreta.
Uno de los problemas más graves que señaló es la implicación de extranjeros en actividades delictivas. La falta de control sobre la inmigración ilegal y la aparente impunidad con la que operan estos grupos han generado indignación entre los ciudadanos.
El dirigente destacó que no se ven iniciativas claras por parte de las instituciones responsables de la seguridad. Núñez planteó que es momento de cuestionar qué acciones se han implementado realmente para garantizar la protección de los puneños.
Además, hizo un llamado a los vecinos a organizarse y exigir a las autoridades que tomen medidas urgentes. Propuso una reunión con la Fiscalía, la Policía Nacional, la Municipalidad y el Gobierno Regional para tratar el problema de forma integral y buscar soluciones concretas.
Núñez también expresó su descontento con el papel de la policía, señalando que su presencia se limita a zonas específicas donde imponen multas de tránsito, en lugar de patrullar las calles y enfrentar la delincuencia.
Finalmente, el presidente del Frente de Organizaciones Populares instó a las autoridades a reflexionar sobre su responsabilidad en la seguridad ciudadana. Pidió un trabajo coordinado y comprometido para devolver la tranquilidad a la ciudad de Puno y a toda la región.