Representantes del Sindicato Base Puno, anunciaron una movilización nacional de trabajadores del INPE en todo el país. El Instituto Nacional Penitenciario podría desaparecer según declaraciones del presidente José Jerí en una entrevista televisiva reciente. Este anuncio impactante provocó una inmediata medida de fuerza con un plantón nacional de los servidores penitenciarios.
Los servidores penitenciarios se autoconvocaron frente a este panorama institucional preocupante. Ellos buscan ser escuchados de manera urgente por el gobierno nacional solicitando diálogo inmediato. Los trabajadores exigen una respuesta clara sobre el futuro de la institución que garantiza la seguridad penitenciaria en el país.
La medida actual es solo preventiva a nivel nacional pero advierten que tomarán una huelga indefinida si no hay rectificación. Los servidores solicitan formalmente establecer una mesa de diálogo con el gobierno para exponer su realidad laboral. La amenaza de paralización total se concretará si el presidente no revisa su posición sobre la desaparición del INPE.
Presidente fundamenta decisión en supuesta corrupción
La posible desarticulación del INPE se fundamenta en afirmaciones públicas sobre una alta corrupción interna según el mandatario. El presidente basó su argumento en supuestos cobros irregulares dentro de los penales dados a conocer por un periodista. Esta información no ha sido verificada oficialmente por las autoridades competentes antes de realizar las declaraciones públicas polémicas.
Los trabajadores sostienen que esa afirmación presidencial de corrupción resulta una indignación para quienes cumplen su labor dignamente cada día. El representante asegura que una persona externa a la realidad penitenciaria no puede realizar tales aseveraciones sin fundamento. Los trabajadores honestos se sienten difamados por las declaraciones que generalizan situaciones sin pruebas concretas de culpabilidad institucional.
El representante mencionó la existencia de otras instituciones involucradas en delitos graves como asaltos a mano armada y narcotráfico. Él cuestionó por qué el INPE está en el foco de la tormenta mediática sin pruebas concretas verificables. La selectividad en señalar instituciones genera sospechas sobre motivaciones políticas detrás de las declaraciones presidenciales contra el instituto penitenciario nacional.
Trabajadores enfrentan severas carencias operativas
Los trabajadores de los centros penales enfrentan severas carencias incluyendo la falta de infraestructura adecuada en las instalaciones actuales. Un solo técnico tiene que relevar a cuatrocientos cincuenta internos en un pabellón penitenciario diariamente. Esta proporción inadecuada de personal compromete seriamente la seguridad tanto de trabajadores como de internos en todos los penales del país.
El personal contratado bajo la modalidad CAS recibe sueldos bajos que apenas cubren sus necesidades básicas mensuales familiares. El gobierno, en lugar de atenderlos, los ha amedrentado con la amenaza de desaparecer por completo el instituto penitenciario. Los trabajadores exigen mejores condiciones laborales y respeto institucional antes de enfrentar cualquier proceso de reestructuración o cierre definitivo del INPE.


