Un grupo de trabajadoras de construcción civil protestó en la institución educativa secundaria San Salvador de Alto Puno, donde el gobierno regional ha comenzado obras físicas. Las mujeres, que se encuentran en la puerta principal del proyecto, exigen ser incluidas en la bolsa laboral, ya que más de 50 personas esperan una respuesta sobre su incorporación.
Una de las trabajadoras expresó que están capacitadas para desempeñar diversas funciones en la obra, incluyendo el manejo de maquinaria. La mujer denunció que, a pesar de haber presentado su solicitud, no han sido convocadas, mientras que otras trabajadoras ya están laborando en el lugar.
El grupo está compuesto por ocho mujeres que se sienten discriminadas por no ser consideradas para los trabajos. Aseguran que tienen las habilidades necesarias y que pueden contribuir al avance de la obra. Además, enfatizan que su inclusión no solo beneficiaría a ellas, sino también a otras madres de familia que necesitan empleo.
Las trabajadoras señalaron que la obra se está gestionando de manera directa y que no se están cumpliendo los compromisos de inclusión laboral. Ante la falta de diálogo con las autoridades, advirtieron que podrían intensificar sus protestas, incluso encadenándose, para exigir que se les brinde la oportunidad de trabajar en el proyecto.


