El transporte urbano en Puno atraviesa una crisis profunda debido al crecimiento desordenado del parque automotor. Combis, mototaxis y vehículos particulares circulan sin rutas planificadas, generando una constante congestión en vías principales como las avenidas La Torre, El Sol y el jirón Tacna, informó el presidente del barrio Bellavista, Julio César Lucano Torres.
En entrevista con Razón Libre de Pachamama Radio, advirtió que la situación se vuelve crítica durante las horas punta, cuando el tráfico colapsa por completo. Los usuarios se ven afectados diariamente, enfrentando largas demoras, mayor riesgo de accidentes y exposición a altos niveles de contaminación ambiental y sonora.
Gran parte de los vehículos de transporte público son antiguos y emiten gases contaminantes que deterioran la calidad del aire en esta ciudad. A ello se suma el ruido constante de motores y bocinas, que agrava la contaminación sonora y perjudica la salud de los ciudadanos y visitantes, indicó.
Otro factor que complica el problema es la falta de paraderos formales. Esto permite que los vehículos se detengan en cualquier lugar, generando caos en las calles, que ya son estrechas y mal planificadas. Esta práctica pone en riesgo tanto a peatones como a conductores.
Usuarios y autoridades comparten responsabilidad
Lucano también criticó los hábitos de los usuarios, quienes piden paradas cada cuadra, lo que entorpece aún más la circulación. A su vez, cuestionó la falta de acción de la municipalidad, que no ha logrado establecer puntos claros y ordenados para el ascenso y descenso de pasajeros.
Una posible solución, según Lucano, sería implementar rutas directas a través de la avenida Costanera, desde la Universidad hasta Salcedo. Esta alternativa permitiría descongestionar el centro histórico, aprovechando vías más amplias y reduciendo el tráfico en las zonas más estrechas.
Las autoridades locales enfrentan el reto de modernizar el sistema de transporte público. Esto incluye la renovación de la flota vehicular, la implementación de rutas eficientes y la construcción de infraestructura adecuada para garantizar un tránsito ordenado y seguro.
Lucano subrayó que el futuro del transporte en Puno depende de una planificación integral. Esta debe considerar la geografía urbana, las necesidades reales de movilidad y la incorporación de sistemas modernos que reduzcan la contaminación y mejoren la calidad de vida en esta histórica ciudad lacustre.


