El acuerdo firmado el pasado 27 de noviembre del 2023 entre Puno, Moquegua y la PCM establecía claramente la prohibición de realizar acciones que vulneren las fronteras entre ambas regiones durante el proceso de delimitación territorial. Sin embargo, la gobernadora Ninfa Gutiérrez Ayala habría omitido este compromiso tras anexar los centros poblados de Titire y Aruntaya al distrito moqueguano de Carumas.
La violación del documento suscrito entre las regiones y la Presidencia del Consejo de Ministros se evidenció cuando Moquegua realizó acciones administrativas en territorio puneño, específicamente en las comunidades de Titire, Aruntaya y ahora trataría de vulnerar Hatucachi. El acuerdo, que cuenta con la firma de Gutiérrez Ayala, prohibía expresamente cualquier acción administrativa o social mientras durara el proceso de delimitación territorial entre ambas jurisdicciones.
Durante las protestas realizadas por pobladores del distrito de Pichacani-Laraqueri, dirigentes denunciaron que el incumplimiento del acuerdo se materializó con la anexión de territorios que consideran parte de la jurisdicción puneña. Los manifestantes expresaron su malestar por la falta de ejecución de obras y proyectos productivos en la zona, donde ahora se desarrolla la controversia territorial.
El gobernador regional de Puno, Richard Hancco, confirmó que las ordenanzas emitidas por Moquegua contravendrían directamente los términos del documento firmado en noviembre pasado. La autoridad detalló que estas acciones representan provocaciones que afectan la convivencia pacífica entre ambas regiones, vulnerando los compromisos asumidos ante la PCM.
La documentación firmada el 27 de noviembre establecía que ninguna región podría realizar acciones unilaterales que modifiquen el estatus territorial mientras se desarrolle el proceso oficial de delimitación.
Este compromiso, suscrito por Gutiérrez Ayala, Hancco y representantes de la PCM, buscaba mantener la paz social durante las negociaciones entre ambas gestiones regionales.
Hancco anunció que presentará un documento ante la Presidencia del Consejo de Ministros solicitando intervención por la presunta violación del acuerdo territorial. La autoridad regional explicó que las acciones de Moquegua en las comunidades de Titire, Aruntaya y Hatucachi representan un incumplimiento directo de los términos establecidos en el documento de noviembre del 2023.
Las acciones sociales y administrativas realizadas por autoridades moqueguanas en territorio puneño generaron tensión entre los pobladores de ambas regiones, quienes observan cómo se desarrollan medidas unilaterales sin respetar los acuerdos previos. Esta situación pone en riesgo la estabilidad del proceso de diálogo establecido entre las gestiones regionales.
El gobernador exhortó a las autoridades de Moquegua a respetar el acuerdo suscrito y resolver las controversias mediante los canales legales correspondientes, respuesta que es considerado benévolo y complaciente de la autoridad regional.
Hancco reiteró que agotará todas las instancias necesarias para hacer cumplir los términos del documento firmado, manteniendo abierta la coordinación con comunidades y municipalidades para respaldar acciones legales que protejan la integridad territorial de Puno.


