El analista político Juan Barrios opinó acerca de la aprobación de estudios de impacto ambiental en proyectos mineros, específicamente en relación al caso del proyecto Conga en Cajamarca. Barrios cuestiona cómo se pasaron por alto ciertas “imperfecciones” en los documentos técnicos que deberían garantizar una explotación segura y evitar la contaminación.
Según Barrios, es posible que algunos funcionarios y empleados gubernamentales tengan una inclinación pro-minera, priorizando los intereses de las empresas sobre la protección del medio ambiente y la vida. El analista sugiere que esta tendencia podría estar influenciada por una mentalidad de “capitalismo salvaje” que enfatiza la riqueza y el lucro por encima de consideraciones ambientales.
El experto señala que esta inclinación puede llevar a la aprobación de estudios de impacto ambiental favorables y otros requisitos administrativos que permiten el paso de la fase de exploración a la de explotación minera, sin considerar adecuadamente los riesgos ambientales.
No obstante, reconoce la necesidad de explotación minera para generar riqueza, pero estableciendo límites claros para proteger el medio ambiente. Propone que se establezca un porcentaje máximo de afectación ambiental que no debe ser sobrepasado en ningún proyecto minero.
El analista enfatiza que, si un proyecto minero va a afectar gravemente al medio ambiente, es preferible no explotarlo. “Me inclino por la vida”, afirma Barrios, subrayando la importancia de una explotación racional de los recursos naturales.
Respecto al caso específico de Conga, Barrios señala que mientras el caso se analiza en la vía jurisdiccional, administrativamente se considera que se han seguido los procedimientos correctos, lo que llevó a la aprobación inicial del proyecto.